Hola, buenos días, hoy Leti nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
ACCIÓN DE GRACIAS
Estamos de fiesta: ¡es el cumpleaños del reto! Hace 13 años que empezamos a mandar estos mensajes. Todo empezó por una persona. Ella me pidió que la enseñase a amar, y la manera que mejor me parecía era compartirle mi oración.
Así, cada mañana, al final de mi oración, le mandaba un mensaje compartiendo lo que sentía que el Señor me pedía en ese día, compartiendo por qué le daba gracias y cómo vivir el día desde el amor. Porque para ser felices solo necesitamos orar y amar. Primero, todo lo recibimos de Cristo en la oración y, después, lo damos desde el amor. Después, esa persona empezó a compartirlo y así se extendió.
Hoy miro atrás y veo cómo el Señor ha hecho una obra grande. Nos ha mostrado cada día Su amor, un amor que es nuevo cada mañana. Nosotras lo único que hemos hecho ha sido no estorbar al Señor y poner nuestras manos, mente y espíritu a Su servicio, para que cada día llegue un mensaje del amor de Cristo.
Le doy muchas gracias al Señor por el reto, porque es un estilo de vida que cada día le pido al Señor: estar atenta para verle y descubrirle.
Pero el reto no existiría si no estuvieras tú cada mañana leyéndolo, orándolo, meditándolo y llevándolo a tu vida. Sin ti, el reto no daría el ciento por uno, como nos dice Jesús. Gracias a cada uno que leéis el reto y lo compartís. Entre todos anunciamos al mundo el amor de Cristo que nos salva y nos redime.
En el Evangelio, Jesús nos pide sembrar y del resto ya se hace cargo Él. Esto es lo que hacemos: hablar y no cansarnos de hablar del Corazón de Cristo, del amor que encierra y que es para cada uno de nosotros.
Hoy el reto del amor es unirnos en acción de gracias al Señor por todos los dones recibidos en este tiempo y pedirle que nos cuide y proteja para seguir anunciando Su amor.