MFC. Jorge E. Ferrer D.
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Los matrimonios y relaciones de pareja inician siempre de la misma manera, mucha ilusión, buenas intenciones una gran amistad, comunicación sincera, sueños compartidos, etc., entonces… ¿Porqué o donde inicia el deterioro de su relación? De acuerdo a los resultados de la investigación realizada por el Dr. John Gottman, durante un periodo de más de 40 años con parejas exitosas y aquellas que fracasaron, podemos decir que la relación se vuelve tóxica cuando las soluciones empleadas no son las adecuadas, se enfocan en lo negativo de su pareja, dejan de revisarse a sí mismos para señalar y explicar las fallas en el otro. Como nos dice el Papa Francisco, no existe el matrimonio perfecto… Toda relación conlleva en sí misma un paquete de problemas personales que cada uno trae a la relación, el estrés externo mal manejado termina por afectarlos a ambos, llega la guerra de poderes que no busca escuchar sino responder, no se busca comprender sino atacar, lo importante para quienes fracasan es siempre tener la razón.
Las parejas dejan de procurarse sentimentalmente, emocionalmente no se cuidan y el ambiente en casa se torna tóxico y negativo, se distancian emocionalmente, se ignoran llevándoles a vivir una vida aparte de la que se tiene en casa, es cuando la separación les parece la única o la mejor salida a su situación, el Dr. Gittman muestra en los resultados obtenidos que las parejas que sobreviven con éxito a un proceso de deterioro son aquellas en las que los cónyuges empiezan a verse como parte de un equipo bien consolidado y no como rivales.
El motor de arranque es en la mayoría de los casos los recuerdos que se tienen de su principio, de cuando aquel primer beso, del momento en que se tomó la decisión de unir sus vidas para realizar un proyecto conjunto y otros recuerdos positivos. Sin embargo, para mantenerse unidos lo que se debe reconstruir es la amistad que se tuvo en sus inicios, es la única manera para volver a comprometerse, especialmente cuando lleguen los desacuerdos… La gran mayoría de los matrimonios en conecto y al borde del precipicio del divorcio pueden salvarse, dependerá de dos cosas.
La primera es LA DISPOSICIÓN de ambos para volver a dialogar, aprender a hablar de nuevo de mis sentimientos y emociones dejando de señalar culpables. Lo segundo es LA VOLUNTAD… Si uno de los dos no desea salvarse a sí mismo, a su pareja y a la relación, no hay manera… Un error común es intentar segundas oportunidades, que suenan siempre a más de lo mismo, por ello es normal que no sean e‑caces y terminen haciendo lo mismo que les llevó al fracaso. Lo que se tiene que hacer es, además de lo escrito con anterioridad, empezar a construir una relación sólida desde cero, reavivar la llama del amor sin buscar grandes troncos, es con hojarasca que volverá a prender.
Hoy la invitación es a revisar el tipo de relación o matrimonio que estás viviendo:
1.- Hacerlo con total honestidad.
2.- No buscar justificaciones o culpables.
3.- Sin crítica o juicios personales.
Si no puedes ser honesto contigo mismo ¿cómo serlo con tu pareja? Es momento de dar un golpe de timón en tu vida de pareja y familiar, te invitamos a hacerlo de la manera correcta y con un profesional que pueda guiarlos por un camino estudiado y con resultados tangibles, dejar de lado los consejos y buenas intenciones para iniciar a hacerlo de manera científica, como terapeuta. familiar te puedo decir que querer es poder, ponte en contacto con un servidor para mejorar tu vida marital y tu familia.
