Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
VIVIR AGRADECIDOS
Ayer celebramos la fiesta del Corpus Christi. En este día son muchas las cosas que me llaman la atención y me vuelven la mirada al Señor. Una de ellas es cortar todas las rosas que hay en la huerta para deshojarlas y, con esos pétalos, alfombrar el camino por donde pasa el Señor durante la procesión.
Mientras estaba en la huerta con mis tijeras, guantes y cesto, cortando las rosas, me daba cuenta de lo maravillosas que son las rosas. ¡Qué belleza encierran! Este año han florecido muchísimas y le daba gracias al Señor por ello, ya que hace posible las alfombras de flores para este día.
No salía de mi asombro, con una acción de gracias profunda a Jesús. Le daba gracias por la naturaleza, por cómo ha creado con amor cada flor para alegrarnos con su fragancia y belleza. Porque lo ha creado todo para nosotros.
A veces damos por hecho las cosas, pensamos que como hemos nacido ya con la naturaleza, pues que es algo normal y que es nuestro. Y la verdad es que es un regalo que el Señor nos hace para alegrarnos el día, para ensancharnos el alma. Es puro don del Señor.
Me daba cuenta de cómo el Señor hace que todo esté encadenado y que cuando das gracias por una cosa, rápidamente te salta la siguiente y luego otra y así sucesivamente. Me explico, le daba gracias por las rosas tan bellas, por poder cogerlas y deshojarlas en un cesto y rápidamente he pasado a darle gracias por la Eucaristía, por quedarse con nosotros de una manera real. Después le daba gracias por la procesión, porque Él camine por donde todos los días paso, le daba gracias por el don de la fe, porque puedo mirarlo en la custodia y decir: “Señor mío y Dios mío”… Porque el Señor te ha creado para que vivas cada instante con Él, que le descubras en todo lo que vives y le ames.
Hoy el reto del amor es darle gracias al Señor desde primera hora del día, descubriendo a lo largo de tu jornada que Él está contigo y darle gracias por todo.
VIVE DE CRISTO