Konaté Hernández
Cancún, Quintana Roo.– Un llamado a los laicos comprometidos que sientan la corresponsabilidad de ayudar, evangelizar el mundo que cambia a un ritmo vertiginoso, es la invitación de Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, L. C., en la Catedral de la Santa Cruz y Santísima Trinidad en Cancún.
En especial la participación de la juventud es importante, por el lenguaje, mentalidad, cultura que traen, en esta época que todo es digital, incluso para evangelizar es más fácil, precisó.
Hoy en día el laico juega un papel preponderante en la Iglesia, que cada vez tiene una mayor participación y colaboración incluso en la conducción y evangelización en la Iglesia, para que laicos y jóvenes puedan llegar a todos a través de las nuevas tecnologías, de ahí la importancia de conmemorar el día del laico que se realizará la víspera de la Solemnidad de Cristo Rey, el 25 de noviembre.
En el Evangelio se encuentra la respuesta para que los jóvenes inquietos busquen y encuentren la respuesta de que Dios sí quiere responder, ayudar y acompañarlos, por lo que reiteró acercarse, seguir al único Señor de señores, Rey de reyes y no a los hombres, porque no hay nadie por encima de los demás, porque todos somos iguales, hermanos y el deber es dialogar, apoyarse mutuamente, acompañamiento y solidarizarse con los demás.
Mientras que con respecto a los festejos a la Virgen de Guadalupe que iniciará con el docenario del 1º al 12 de diciembre, recomendó a ciclistas, peregrinos, antorchistas, tener precaución y no arriesgar la vida en la carretera, entre otras cosas por los asaltos, pero sobre todo por la gran cantidad de vehículos pesados que circulan como volquetes y trailers, que con un “vientecito”, pueden sacarlos de la carpeta asfáltica.
En torno al huracán Otis, dijo que la postura de la Iglesia es, además de rezar, encomendar a Dios a todas las personas que sufren y sobre todo solidarse, tal como paso en 2005 cuando la zona norte de Quintana Roo fue azotado por el huracán Wilma, en ese tiempo se repartieron un mil 14 toneladas de despensas con el apoyo de 72 universidades y algunas televisoras que enviaron ayuda para hacerla llegar al último rincón de la entidad.
No debe de haber excusas para no donar y dejar todo al gobierno, donar es un deber humanitario y la Iglesia Católica cuenta una red de ayuda eficaz a nivel nacional, estatal y diocesana como Caritas, para repartir las despensas. En Quintana Roo, los párrocos ya se movilizan a través de Caritas parroquial, diocesana para trasladar la ayuda a través de trailers, lo que pasa que a la Iglesia no le gusta cacarear el huevo, como hacen los políticos, concluyó Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas.