Niña mía,
Tornaste mi corazón en alegría
al llegar a mi vida tardía,
transformas en dulce agonía
mis noches de melancolía,
purificas el alma mía,
tierno capullo,
luz que ilumina
el oscuro sendero
que sólo caminaría,
si no encontrara,
la mano que me guía
el arduo jornal, no finalizaría,
y así sumergidos
en el amor trinitario
Sacratísimo Corazón de Jesús,
Inmaculado Corazón de María
celestial princesa,
una trilogía
de ágape en koinonía:
¡Dios, tú y yo!
Con especial afecto
Konaté Hernández López
Cancún, Quintana Roo, 16 de junio de 2023.