Adviento 

Nov 22, 2022

Elisa Sixtaga Antele

Ciudad de México.- En latin: adventus Redemptoris, ‘venida del Redentor’ es el primer período del año litúrgico, y consiste en un tiempo de preparación espiritual para la celebración del nacimiento de Cristo.

Con una duración de 22 a 28 días, lo integran los cuatro domingo más próximos a la celebración litúrgica de la Natividad; el primer domingo de Adviento marca el inicio de la temporada navideña, oscilando entre el 27 de noviembre y el 3 de diciembre. 

El segundo domingo de Adviento oscila entre el 4 de diciembre y el 10 de diciembre; el tercer domingo es conocido como Gaudete, oscila entre el 11 de diciembre y el 17 de diciembre y el cuarto domingo de Adviento entre el 18 de diciembre y el 24 de diciembre. La Iglesia Católica considera al Adviento como un tiempo de oración, reflexión caracterizado por la espera vigilante, es decir, tiempo de esperanza y de vigilia, arrepentimiento, perdón y alegría. 

Con el Adviento inicia el año litúrgico que consiste en un período de preparación espiritual para la Solemnidad de la Natividad, nombre litúrgico de la Navidad, con la que se celebra el nacimiento de Jesús. En el catolicismo, el primer domingo de Adviento es aquel que marca el comienzo del año litúrgico, tiene lugar en el domingo siguiente al de la Solemnidad de Cristo Rey, último domingo del año litúrgico anterior, que si bien precede al tiempo de Navidad, desde el punto de vista espiritual su finalidad es preparar al creyente para la segunda venida de Cristo y el encuentro definitivo con Dios.

Corona de Adviento  

Constituye una tradición cristiana que simboliza los cuatro domingos que integran el Adviento en el calendario litúrgico de la Iglesia de Occidente. Se trata de un conjunto de ramas verdes, de preferencia de especies perennifolias y en cualquier caso sin flores debido a la austeridad propia del Adviento, dispuestas o trenzadas en círculo, a las que se suman cuatro cirios ubicados en la periferia.  

El primer cirio se enciende en el primer domingo de Adviento, junto con la lectura de un pasaje bíblico o la realización de plegarias. Sucesivamente se encienden los restantes cirios, uno nuevo en cada uno de los siguientes domingos, hasta que en el domingo previo a la Navidad se encienden los cuatro cirios. A menudo, se coloca en el centro un quinto cirio de color blanco, que se enciende en Nochebuena o en Navidad.7​La costumbre se observa tanto en reuniones familiares como en servicios litúrgicos públicos. 

El simbolismo de cada elemento constitutivo de la corona preexistía al mismo cristianismo. El círculo es un símbolo del ciclo eterno de las estaciones, mientras que las especies perennifolias en general simbolizan la inmortalidad, y la luz se identifica con el espíritu y la fuerza de la vida que persiste, aún en medio de los días cortos y del frío que gobierna usualmente el Hemisferio Norte en el tiempo de Adviento. En la simbología cristiana, la luz significa Cristo, a partir del Evangelio de San Juan que lo presenta como la «luz del mundo» (Juan 8:12). 

Lecturas bíblicas propias de Adviento 

La Iglesia suele presentar en la liturgia de Adviento lecturas bíblicas veterotestamentarias descriptivas de la esperanza profética puesta en la llegada del Mesías, así como lecturas neotestamentarias relativas al tiempo previo al nacimiento de Jesús, o al tiempo previo al inicio de su ministerio público, entre otras. A partir del Concilio Vaticano II, se produjo una variación notable de la liturgia de la Iglesia católica tendiente a enriquecer el tiempo del Adviento con textos bíblicos diferentes en distintos años calendario. 

A partir del Concilio Vaticano II 

CICLO A: -Domingo Primero: Isaías 2,1-5; Salmo 121 1-8; Romanos 13, 11-14a; Mt. 24, 37-44. -Domingo Segundo: Isaías 11,1-10; Salmo 71, 1-2. 7-8. 12-13. 17; Romanos 15, 4-9; Mt. 3, 1-12. -Domingo Tercero: Isaías 35, 1-6a 10; Salmo 145, 7. 8-9a. 9bc-10; Santiago 5, 7-10; Mt. 11, 2-11. -Domingo Cuarto: Isaías 7, 10-14; Salmo 23, 1-2. 3-4ab. 5-6; Romanos 1, 1-7; Mt. 1, 18-24. 

CICLO B: -Domingo Primero: Isaías 63, 16b-17. 19b; 64, 2b-7; Salmo 79, 2ac y 3b. 15-16. 18-19 4; 1 Corintios 1,3-9; Mc. 13, 33-37. -Domingo Segundo: Isaías 40, 1-5. 9-11; Salmo 84, 9ab-10. 11-12. 13-14 8; 2 Pedro 3, 8-14; Mc. 1,1-8. -Domingo Tercero: Isaías 61, 1-2a. 10-11; Lc. 1, 46-48. 49-50. 53-54; 1 Tesalonicenses 5,16-24; Jn. 1, 6-8.19-28. -Domingo Cuarto: 2 Samuel 7,1-5. 8b-12. 14a.16; Salmo 88, 2-3. 4-5. 27 y 29; Romanos 16,25-27; Lc. 1,26-38. 

CICLO C: -Domingo Primero: Jeremías 33, 14-16; Salmo 24, 4bc-5ab. 8-9. 10 y 14; 1 Tesalonicenses 3, 12- 4,2; Lc. 21, 25-28, 34-36. -Domingo Segundo: Baruc 5,1-9; Salmo 125,1-2ab.2cd-3.4-5.6; Filipenses 1,4-6.8-11; Lc. 3,1-6. -Domingo Tercero: Sofonías 3,14-18; Isaías 12,2-3. 4bcd. 5-6; Filipenses 4,4-7; Lc. 3,10-18.-Domingo Cuarto: Miqueas 5,1-4; Salmo 79, 2ac y 3c. 15-16. 18-19; Hebreos 10, 5-10; Lc. 1,39-46 

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