Por la necesidad de dar atención espiritual a la creciente población, desde 1998 surgió se contempló el conjunto arquitectónico para convertir a Cancún como la sede episcopal de la Diócesis Cancún Chetumal, un proyecto que sufrido varias interrupciones como la del Parque Bicentenario en 2009.
Konaté Hernández
Cancún, Quintana Roo. – El proyecto de remodelación de la Catedral de la Santa Cruz y Santísima Trinidad, contempla seis etapas y un monto aproximado por los 13 millones de pesos.
Sin precisar cuándo concluirá la remodelación del recinto, podría llevarse algunos años, y recibirá en promedio entre 500 a 800 fieles, aforo que irá en aumento conforme vaya pasando la situación pandémica.
Como un proyecto de gran envergadura, la remodelación de la catedral de Cancún se realizará en seis etapas, sin obstaculizar el culto sagrado. Sin precisar el monto total, se calculó un promedio aproximado a los 13 millones pesos, por lo que podría concluir en un periodo largo. Los recursos serán apoyos económicos proporcionados por las instituciones, bienhechores, fieles y la gente de buen corazón.
Un proyecto avalado por los Colegios de Arquitectos e Ingenieros, cuenta con los permisos e intervención de las autoridades correspondientes, de no impactarán áreas nuevas. Los materiales propuestos serán de la región, con un sentido arquitectónico, con un simbolismo que interactuará con la cultura maya, en cada una de sus etapas, sin afectar la vegetación ni especies endémicas existentes, agregándose una mayor flora.
Una catedral en medio de la selva
Propósito del proyecto es dar una imagen renovada fresca, con principios de una arquitectura vernácula, que siga la tradición regional, adaptada a la herencia ancestral, con el uso de piedra, madera e interacción con la naturaleza, para crear un hito representativo. Se respetará el 100 por ciento de las estructuras del edificio conservando la visión de elementos y un cambio de acabados para lograr la interacción religiosa del recinto con el medio ambiente. No será la selva en la catedral sino la catedral en medio de la selva.
Busca integrar y mejorar todas las áreas
El proyecto contemplará nueva área para el bautisterio, se ampliará el presbiterio; el coro estará en la parte alta del recinto, se ampliará la sacristía. En las naves laterales se colocarán una nueva techumbre a base de palma tipo palapa. Contará con una plaza o atrio con mayor amplitud; mientras la torre para el campanario tendrá una altura aproximada de 30 metros. Se mejorarán los andadores internos y se adicionarán distintas amenidades para la interacción de sus visitantes.
Un nicho de identidad
Un signo del magisterio y autoridad del pastor es la catedral es la cátedra del Obispo, como signo de unidad de los creyentes en la fe proclamada en la Iglesia Particular, que preside la liturgia, bendice los santos óleos y realiza las sagradas ordenaciones. Es la expresión luminosa del arte y la piedad, que contiene obras de arte sacro, destacadas por su dignidad y majestuosidad de sus estructuras, es un poderoso símbolo visible de Cristo, que ora, canta y adora en esta tierra.
De ahí la importancia de inculcar en los fieles, con los medios adecuados el amor y la veneración a la catedral como centro de la actividad litúrgica de la Diócesis, lugar de peregrinaje de las parroquias o regiones diocesanas que acuden al recinto. Un proyecto de embellecimiento que busca ser el espacio de recogimiento y espiritualidad para fusionar la cultura milenaria, como hace 500 años cuando se colocó en Cozumel la Cruz como un signo de la de la fe que transformó a la pirámide en nicho de identidad y tradición en Quintana Roo. Estuvieron en la conferencia de prensa en el salón Arcángeles, Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, Obispo de la Diócesis, el padre Mario González Suárez, rector de la Catedral, así como el arquitecto Abraham Santiago Hernández como coordinador del proyecto y el ingeniero José Guzmán.