Tal y como sucede cada uno de los días del año, la Iglesia Católica conmemora hoy la vida y canonización de algunas de sus figuras más representativas, ya sean estas santificadas o beatificadas. Entre todas ellas, en la jornada de hoy, 24 de octubre, destaca la de San Antonio María Claret, un sacerdote de Sallent, Barcelona, que ejerció su función con gran celo y acabó fundando la Congregación de los Misioneros del Corazón de María.  

Antonio Claret y Clará nació el 23 de diciembre de 1807 en Sallent, Barcelona, siendo el quinto de once hermanos, y fue bautizado el día de Navidad, pero la escasa salud de su madre hizo que  se quedara al cuidado de una nodriza en Santa María de Olot. Sin embargo, una noche en que Antonio se quedó en la casa de sus padres, la de la nodriza colapsó y murieron todos los que estaban dentro; un hecho que supuso, desde ese momento, una señal de providencia para Antonio.

Mientras Antonio jugaba, crecía y estudiaba, ya destacaban dos amores en su vida, siendo, por un lado, la Eucaristía y, por otro, la Virgen. Él asistía con atención a la misa, así como dejaba sus juegos para visitar a Jesús en la iglesia, siempre que esto no molestase a sus compañeros. Además, acompañado de su hermana Rosa, acudía con frecuencia a la ermita de Fusimaña, donde rezaba diariamente el rosario.

A medida que iba creciendo, Antonio iba dando pasos en su camino eclesiástico y vivió, como seminarista externo, con el sacerdote Don Fortián Bres, en el seminario de Vic. Más tarde, en junio de 1835, fue ordenado sacerdote en Solsona, aunque el vicario capitular de Vic lo destinó a su Sallent natal, donde ejerció dos años como vicario parroquial y otros dos como ecónomo.

Tras ello, además de ejercer su tarea pastoral, se dedicó a atender a los enfermos, dado que los médicos habían huido a causa de la guerra. Asimismo, también comenzó a llevar a cabo diferentes misiones populares, hasta que, en enero de 1841, quedó desvinculado de su cargo parroquial para poder desplazarse a predicar por diferentes poblaciones de la diócesis. Esta actividad se extendió a todas las diócesis catalanas, excepto la de Tortosa, en 1844 y, años después, en medio de la Segunda Guerra Carlista, cuando barajaba trasladarse a otras provincias de España o incluso a Francia, fue enviado por su vicario capitular a Canarias.

A su regreso a Cataluña, con cinco sacerdotes más, fundó la Casa-Misión de Vic con el nombre de Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María. Sin embargo, a los pocos días recibió el nombramiento para ser arzobispo de Santiago de Cuba y, aunque quiso renunciar, finalmente tuvo que aceptar. Allí permaneció durante siete años, los cuales no fueron fáciles, dado que fue víctima de varios intentos de asesinato, siendo, uno de ellos, probablemente llevado a cabo por un sicario a sueldo, el que más le debilitó. 

En ese intento de asesinato, una navaja barbera que se dirigía a su cuello acabó por cortar su mejilla izquierda y el brazo derecho, lo que derivó en una pérdida de sangre que afectó a su salud física y le condujo a un estado de perplejidad en el que valoró si debería de permanecer, o no, en la isla. Finalmente decidió quedarse, por petición del papa, aunque solo un mes después fue llamado de forma urgente a Madrid.

El mismo día de su llegada, la reina Isabel II le comunicó que le había elegido para que fuese su confesor real, en sustitución del fallecido arzobispo de Toledo, el cardenal Bonel y Orbe. Permaneció al lado de la realeza hasta que fue convocado a participar en el Concilio Vaticano I, sin embargo, tras haberse interrumpido, Claret se trasladó, ya muy enfermo, a la residencia que sus misioneros habían establecido en Prades.

Unos meses después y, tras esconderse del embajador español en París, Antonio falleció en la abadía cisterciense de Fontfroide, muy cerca de Narbona, el día 24 de octubre de 1870. A posteriori, fue beatificado por Pío XI en 1934 y canonizado por Pío XII el 7 de mayo de 1950.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Contenido Protegido