Por Ramón Pretelin Escalera

Reconociendo Señor, que, por error o ignorancia, he adorado ídolos que no me acercan a ti y me alejan de ti, fuente de amor verdadero y de vida plena, me deshago (o destruyo) esta imagen idolátrica, volviendo a ti mis ojos y mi corazón: 

“Ya no creo en esto que aquí en tu presencia destruyo, porque así lo he destruido ya en mi corazón”. 

Consiente de tu amor y libre de temor, pues no rechazas a quien se alejó de ti y vuelve con el corazón a la vida, sin esclavitudes, Señor, me has enseñado a mirarte a ti, Dios verdadero, que no castiga, sino que me acoges y me abrazas tiernamente. 

Lleno de confianza, sé que al destruir “imágenes hechas por manos humanas”, estas no pueden castigarme ni causarme ningún mal, de ningún tipo.

Tú, Señor, que podrías castigarme no lo haces, los ídolos no tienen poder sobre mí, son basura, sólo tú Señor, y no lo haces porque eres misericordioso y compasivo. 

Aleja de mí el temor y todo miedo, ante cualquier amenaza supersticiosa en que he caído y, de tu mano, me has levantado y me has tendido la mano y levantado, como un hombre libre, ¡un hombre nuevo! Amén. https://desdelafe.mx/noticias/sabias-que/como-eliminar-la-imagen-de-la-santa-muerte/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Contenido Protegido