Redacción/PERIÓDICO SAGRADA FAMILIA
Este inicio de semana ’16 de junio’, la comunidad, ciudadanos y cientos de fieles católicos conmemoraron los 507 años desde que Pedro de Alvarado, miembro de la expedición de Juan de Grijalva y adelantado español, navegó por primera vez el río Papaloapan.
En Alvarado celebran la fiesta patronal dedicada a María Santísima bajo la advocación Mariana, Nuestra Señora del Rosario, durante el periodo del novenario del 1° al 15 de octubre. Durante estas fechas, el municipio se llena de colorido música, danza, eventos culturales, y actividades religiosas.
Para el mes de mayo se realizan «cruces de Mayo», festividad religiosa y cultural anual que comienza a principios de mayo y culmina con la Fiesta Blanca y el Arroz a la Tumbada Más Grande del Mundo.
La celebración incluye música, bailes folclóricos, decimeros y jaraneros, así como exposiciones artísticas. En Alvarado, la celebración de «Las Cruces de Mayo», es una tradición icónica que atrae a locales y turistas. Además de las actividades culturales y artísticas, los visitantes pueden disfrutar de la gastronomía local, como el Arroz a la Tumbada, un plato típico elaborado con arroz, caldo de mariscos y epazote.
Durante la festividad, se decoran las calles con cruces y se realizan actividades religiosas y culturales. La festividad tiene como objetivo expresar la veneración a la cruz como símbolo del cristianismo y celebrar la esperanza y la vida.
Las Cruces de Mayo en Alvarado son una oportunidad para disfrutar de la cultura y la tradición, así como de la gastronomía local.
Continuado con la fundación, en 1518, al remontar la corriente del Papaloapan a bordo del navío San Sebastián, acompañado por dos embarcaciones más, Alvarado llegó hasta la desembocadura de la albufera donde confluyen los ríos Blanco, Acula y Papaloapan.
Sin esperar al capitán Grijalva, decidió explorar la región por su cuenta, bautizando tanto al río como a la albufera con su apellido: Alvarado. Esta zona, habitada originalmente por grupos olmecas y totonacas dedicados a la pesca, fue el primer punto de contacto de los españoles en estas tierras.
La cuenca del Papaloapan —conocida por los pueblos originarios como Atlizintla, que significa “junto al agua abundante”— corresponde hoy al territorio del municipio de Alvarado, nombrado en honor al conquistador.
Mucho antes de la llegada europea, diversos grupos indígenas habían dejado evidencia de su presencia en este lugar, como el “Cerro de las Conchas”, un muro artificial formado de arcilla y valvas de ostión, construido paralelo a la laguna.
A partir de 1568, los españoles que se establecieron en la región se dedicaron principalmente a la pesca y a la arriería. Con el paso del tiempo, Alvarado se transformó en un municipio con una economía diversificada, destacando en agricultura (caña de azúcar, maíz, piña, sandía, mango, frijol y coco), pesca y producción de ganado vacuno.
En este aniversario, se celebró la memoria viva de Alvarado: su pasado indígena, su etapa colonial y su constante transformación, que hoy la convierten en una comunidad próspera, rica en historia y cultura. https://www.facebook.com/share/p/1EoiLQEV7V/