Hola, buenos días, hoy Leti nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
TU RITMO DE VIDA
Hace unos días tuve que desmontar una estantería que llevaba muchos años montada. Mi sorpresa fue que, al quitar la estantería, el suelo de debajo no estaba pintado. Me encontré con el ladrillo tosco, rojo, pero muy empobrecido. Aunque el suelo del monasterio es antiguo, cada año se pinta de rojo inglés, ya que es su color original. Sin embargo, este no estaba pintado y había un gran contraste.
Me llamó mucho la atención, porque pensé: por un lado, no se ha cuidado con pintura y, por lo tanto, no está protegido; pero, por otro lado, está en su estado original, se parece más al fundacional.
Me di cuenta de que muchas situaciones que vivimos pueden verse de distintas maneras: desde la pena o desde la oportunidad. La actitud que tomemos ante las cosas nos ayudará mucho a ser felices.
En muchas ocasiones al leer el Evangelio, vemos a Jesús que, aunque le podían estar buscándolo para prenderlo y matarlo, como no era su hora, se escabullía entre la gente y seguía predicando. No dejaba que las circunstancias marcaran su ritmo, su vida la marcaba la voluntad de Dios.
Y nosotros, ¿qué es lo que marca nuestro ritmo de vida? ¿Cómo vemos lo que vivimos?
Jesús te regala un nuevo día, y no solo para seguir viviendo. Te lo va a regalar con una cantidad inmensa de gracias, sorpresas y acontecimientos. Él te lo da desde la Vida, para que descubras en ello el amor que te tiene. Es verdad que puede haber cosas que no entiendas, pero déjalo, date un tiempo y dale un tiempo al Señor para comprenderlo. No todo cabe en nuestra cabeza, tiene que entrar en el corazón. Pero te aseguro que todo es porque te ama.
No dejes que las circunstancias dirijan tu día, deja que sea el amor de Cristo quien marque tu rumbo de día.
Hoy, el reto del amor es decidir cómo quiero vivir el día: agarrarme a la mano de Cristo y descubrir en lo que me acontezca su amor.
VIVE DE CRISTO