En sus redes sociales, compartió cómo su familia se prepara para realizar este esperado peregrinaje.
El conocido influencer “Tu Agricultor de Confianza” compartió su experiencia visitando a la Virgen de Monserrate en Montecristi, Ecuador. Esta tradición familiar le fue inculcada por sus padres, quienes llevan 33 años peregrinando con devoción hacia esta querida advocación mariana.
Cada noviembre, miles de fieles se dirigen al Santuario Arquidiocesano de Nuestra Madre de Monserrate, en Montecristi, como muestra de fe y gratitud hacia la Madre de Dios.
La festividad principal se celebra el 21 de noviembre, día en que la imagen de la Virgen recorre en procesión las calles de la ciudad. Los devotos acompañan a María, elevando oraciones y peticiones confiados en su poderosa intercesión.
En sus redes sociales, Josué, conocido como “Tu Agricultor de Confianza”, compartió cómo su familia se prepara para realizar este esperado viaje.
“Así se viven las fiestas de la Virgencita de Monserrate en Montecristi, Manabí, Ecuador. Miles de personas se movilizan de distintas partes del Ecuador llenos de fe y devoción. Muchos van caminando por muchas horas, otros van de rodilla, otros van en carro, pero el objetivo es llegar a visitar a la Virgencita de Monserrate, por un año más de vida”.
El joven contó que juntan dinero en una alcancía para poder viajar a Montecristi y escriben sus intenciones para pedir la intercesión de la Virgen por su familia.
“Me cuenta mi papi, mi mami, que tienen aproximadamente unos 33 años yendo todos los años donde la virgencita, ya que comenzaron a ir desde que se casaron.
Entonces, nosotros todos los años, hacemos una alcancía donde guardamos monedas, para poder asistir a la iglesia de Monserrat que queda en Montecristi.
Hacemos una intención por nuestra familia, que nos bendiga y que nos pueda permitir estar un año nuevo juntos, y el próximo año así poder venir a donde la virgencita de Monserrate”.
Al finalizar la Misa, pasan a comprar algunos recuerdos y pasear por la ciudad, un momento de fe en familia.
Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti.