Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
JESÚS, OCÚPATE TÚ
Hace unos días en la escuela de lectura Vive de Cristo concluimos el libro “Jesús, ocúpate tú”. Es una biografía que narra la vida de Don Dolindo. La verdad es que os podría compartir mil anécdotas de este gran hombre. Pero en su vida hay un don que le caracteriza: su confianza y abandono en el Señor.
La vida de Don Dolindono fue nada fácil, tuvo muchos sufrimientos, pero su mirada siempre estaba puesta en Jesús y María. Confiaba en Él no solo en momentos puntuales, sino que hizo de su vida un acto de confianza. Por eso vemos en Don Dolindo una gran naturalidad al vivir el trato con el Señor. Entre las muchísimas cosas que nos ha dejado de legado, hay dos que a mí me han encantado:
– Oración del abandono
– Rosario del abandono
Cuando recitas despacio esta oración del abandono, te vas dando cuenta de que tu vida se ve reflejada en ella. Poco a poco vas dejando en manos del Señor aquello que te preocupa y dejas a Jesús que lleve tu vida.
En el Rosario del abandono encuentro una gran paz. Es un Rosario especial, donde recitas diez veces la frase: “Jesús, ocúpate tú”. Al repetir esta frase una y otra vez, te das cuenta de lo que te está preocupando, aquello que te quita la paz y que no te deja descansar. Y mientras tus labios lo recitan, tu corazón se va ablandando y poco a poco dejas paso a Jesús en tu vida para que Él se ocupe.
En el Rosario del abandono he encontrado mucha paz, porque a veces vivimos situaciones que no podemos y no sabemos solucionar, pero a la vez tienes la lucha de querer hacer algo. Por ello, la confianza no es desentenderse de la realidad, es aceptar la realidad, reconocer tu ser de criatura y abrazar la grandeza de Dios.
Hece un tiempo grabamos un audio con el Rosario del abandono que yo escucho todos los días. Por si lo quieres recitar, aquí te dejo el enlace:
Hoy el reto del amor es confiar en el amor de Cristo. Abrazarte a Él con todas tus fuerzas, porque Él nunca te va a fallar.
VIVE DE CRISTO