Konaté Hernández
Cancún, Quintana Roo. – La comunidad tendrá la oportunidad de vivir con intensidad la Solemnidad de Pentecostés y comprender la relación que existe con la Resurrección y la Ascensión de Cristo, comentó don Erasto Mendoza.
Luego de la Pascua la fiesta más importante del año litúrgico es la venida del Espíritu Santo, que este año se celebra el domingo 5 de junio, explicó.
La fecha de Pentecostés es variable cada año, porque tiene lugar 7 semanas después del Domingo de Pascua. En la liturgia de la Iglesia, esta Solemnidad da por concluido el tiempo de Pascua como una fiesta de plenitud.
Es en este sentido que con orden, alegría y amor las comunidades parroquiales, celebran fiesta de Pentecostés el Domingo 5 de junio en la cuasiparroquia en avenida los Tules, Supermanzana 247, Manzana 3, Lote 1 y 2, del fraccionamiento de Villas Otoch, así como en la capilla en el fraccionamiento Villas del Caribe, retorno Marmara calle Villas del Mar en la súpermanzana 520, manzana 35 ambas en Cancún, como su fiesta patronal con la guía espiritual de los padres Raúl Rubén Díaz Hernández de la Orden Neo Catecumenal y Luis Guadalupe Canul Cauich, respectivamente, destacó.
Una comunidad participativa
Por parte la ex coordinadora de la capilla, doña Cándida López Luis, dijo que el recinto católico surgió en el año 2000 a iniciativa de un grupo de personas de la tercera edad, que buscaban un terreno para celebrar el culto sagrado, hasta encontrar el área verde que una empresa de construcción utilizaba una palapa como bodega. Por aquellos años, las fieles se encargaron de acondicionar el lugar al llevar el crucifijo, mesas, manteles, de lo que sería el templo. Con el tiempo cedieron el paso a las nuevas generaciones de fieles que hoy integran la pintoresca capilla del Espíritu Santo, que se estableció por aquellos años sin problemas ni quejas de los vecinos.
A lo largo de 22 años han procurado mantener el lugar limpio, sembrar plantas de varias especies en el área e invitar a la comunidad sumarse, acercarse y participar de las actividades, por lo que la gran mayoría acude al llamado para participar en sus festejos patronales, así como respaldar lo que les costó esfuerzo conseguir para conservar el terreno de su iglesia.
La venida del Espíritu Santo tuvo lugar el quincuagésimo día después de la Resurrección y Ascensión de Jesucristo, que pidió al Padre enviará al Paráclito Prometido para guiar a sus apóstoles y a la Iglesia a continuar su misión evangelizadora, concluyó.