La Diócesis Cancún-Chetumal, necesita santos y entregados sacerdotes, fieles discípulos del Señor, misioneros intrépidos e incansables en el servicio; orar para tener más y mejores seminaristas, colaborar a que logren una formación excelente, que sigan el modelo del Buen Pastor que da la vida por sus ovejas, que sean entregados a su ministerio, con amor pastoral, porque nadie tiene amor más grande que aquel que da la vida por sus amigos, como el buen pastor que dio la vida por sus ovejas.
Konaté Hernández
Cancún, Quintana Roo.– Saber escuchar la voz del Buen Pastor que da la vida por las ovejas que buscan la protección, los buenos pastos y la fuente de agua viva que da la vida eterna, fue el mensaje de Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas en la Catedral de la Santa Cruz y Santísima Trinidad en Cancún
Del 6 al 8 de mayo la Diócesis de Cancún-Chetumal, fue sede de la Asamblea Nacional de Dirigentes del movimiento Jornadas de Vida Cristiana (JVC), en esta ciudad.
Las JVC son grupos dedicados a organizar retiros para evangelizar a jóvenes que tienen el deseo de reunirse de forma presencial y participar en retiros que incrementen su fe, por lo que un promedio de 120 participantes de otras entidades del sur del país de la Provincia Eclesiástica de Yucatán, del centro y 10 jóvenes de Quintana Roo, participaron de las jornadas con el deseo de tener una participación viva de su fe.
Jóvenes deben atender el llamado a su vocación y aceptarla
Inseguridad, violencia, pobreza, narcotráfico, la pandemia y la situación que prevalece afecta la sana convivencia, valores, en muchas familias, lo que en cierta forma hace que las vocaciones se compliquen, no obstante, estas se mantienen con el interés, las inquietudes y deseos de los jóvenes de buscar una opción, para ser seleccionados con una atención personalizada humana profunda.
El reto es comprometer a los jóvenes a atender el llamado a su vocación, aceptarla a pesar del ambiente nada favorable, y es en este sentido que entre los seminarios mayor y menor hay un total de 70 seminaristas, 35 en cada uno, y cada año ingresan en promedio entre 8 y 10 jóvenes al Seminario Mayor y un total de 15 adolescentes al Menor, por lo que exhortó a los interesados inscribirse a partir de agosto. La gran noticia es que este fin de semana un total de 28 sacerdotes Legionarios de Cristo, se ordenaron en Roma.
Orar por las vocaciones sacerdotales y religiosas, “la mies es mucha”
Cristo se da cuenta de que a pesar de sus obras y palabras, muchos no lo aceptar como el Mesías, por eso da a entender que algunos son sus ovejas y otros no, depende de la disponibilidad que la persona tenga a escuchar sus enseñanzas sin imponer sus criterios o evaluaciones de maestro. La escucha dócil a la palabra de Dios construye la comunidad de creyentes y hace que sean un solo rebaño con un solo pastor, con un corazón abierto y sincero, como el inicio del discipulado.
Escuchar la palabra de Cristo no es para entretenerse, sino para aprender y poner en práctica su enseñanza de maestro que enseña con el ejemplo y hacerse su discípulo consiste, en seguir su ejemplo, no sólo quedarse encantado con sus palabras. Cuando algunos le dicen al final de su vida: te oímos predicar en nuestras plazas, él contestó: “apartaros de mí, obradores de iniquidad”. Y no les dejó entrar en su Reino.
El Buen Pastor cuida, protege y defiende del enemigo a sus ovejas y nadie se las arrebata de sus manos, cuando abraza a la oveja, la carga sobre sus hombros, no hay nadie que se la pueda quitar, porque le da seguridad, tranquilidad y la conduce a buenos pastos, la mete al redil. Orar por las vocaciones sacerdotales y religiosas, “la mies es mucha, y los obreros pocos; rogar al dueño de la mies, envíe obreros a sus campos”.