María Victoria Chan Cahuich
Ciudad de México. – Con el grito de Viva Cristo Rey y Santa María de Guadalupe, miles de personas de la sociedad civil, empezaron a congregarse en punto de las 10 de la mañana de este fin de semana en el monumento a la Revolución de la Ciudad de México.
Organizados por grupos Próvida, realizaron una marcha pacífica en defensa de las dos vidas: de la madre y del hijo en el vientre materno, indicaron algunos de los asistentes.
Con fortaleza y firmes en la fe, pidieron la intercesión del Señor para no sufrir represalias, de quienes azuzados por el diablo andan como león rugiente en contra de los grupos que promueven la defensa de las dos vidas. México es un país que cuenta con un 77 por ciento de católicos y un 11 por ciento de otras denominaciones religiosas, por lo que el personal médico hizo extensiva la invitación a la población en general unirse en la defensa auténtica de los derechos humanos, a luchar y no permitir que sean devastados los valores por los promotores del globalismo, congresistas e ideologías de agendas que nada tienen que ver con la verdadera cultura mexicana.
El aborto no es un derecho de la salud reproductiva ni soluciona nada, los casos de violación, y que dejará de existir con la legalización del aborte, por lo que es necesario buscar otras alternativas y soluciones, como ejemplo, la adopción como una opción que existe en el país y no recurrir al asesinato de un inocente, cuando la mujer no desea tener al niño o no está de acuerdo con su nacimiento.
Impera una gran confusión respecto a vender el aborto como si fuera un derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo, esto es porque el cuerpo del niño en gestación no es parte de la mujer, es decir, es un ser humano diferente que no se puede ejercer su derecho, pero tampoco terceras personas deben de hacerlo, una confusión no debe ser considerada un derecho reproductivo o a la salud sexual que trata de asesinar al recién nacido, situación que es importante evitar.
La salud productiva, no es saludable sobre todo para el bebe en gestación al que se asesina, de ahí la importancia de aclarar que el propósito de la marcha es la defender las dos vidas, como un derecho fundamental consagrado en la Constitución Mexicana, que a su vez emana de la Declaración Universal de los Derechos Humanos promulgada desde 1948 por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Finalmente la recomendación a los jóvenes, es a no dejarse engañar por la ola verde que promueve una ideología que pretende controlar la natalidad, y de someter a la sociedad, atacando sus valores profundos en el cristianismo, que le da identidad al país, concluyeron.