Cancún, Quintana Roo. — La Fundación Aitana que apoya a niños, adolescentes y jóvenes con cáncer, recibió la visita pastoral, Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, en Cancún.
Ubicado en la colonia Pedregal, cuenta con una capilla con nichos funerarios, que recibió la bendición episcopal del obispo de la Diócesis Cancún—Chetumal.
Acompañado por la presidente de Fundación Aitana, Yusi Dzib Echeverría, quien le comentó que el albergue temporal tiene una capacidad en sus instalaciones para atender a 160 niños de diversas entidades federativas antes, durante y después de sus tratamientos oncológicos.
Con la oportunidad de conocer a menores sobrevivientes de cáncer y otros menores de familiares que lamentablemente fallecieron de este mal. En la actualidad los enfermitos disfrutan de becas escolares, además de ser monitoreados en sus estudios por personal de la fundación.
Yusi Dzib Echeverría, explicó que cuentan con 8 habitaciones que tienen aire acondicionado y dos camas cada una; además de servicios como TV, frigobar y suministro eléctrico vía paneles solares.
Su función es brindar apoyo como albergue a menores pacientes con cáncer, de ahí que durante su tratamiento completo y en sus viajes a diversas ciudades, para el tratamiento contra la leucemia es de 3 años por lo que algunos padres forzosamente dejan de trabajar, de ahí que el apoyo recibido mediante donaciones, avanza en obras de construcción a través del programa de redondeo promovido por conocida tienda de conveniencia. En la actualidad hay niños de otras entidades atendidos en las instalaciones de Casa Aitana, y los más recientes provienen de Sinaloa, Oaxaca, Toluca y Ciudad de México.
Cuenta con instalaciones de uso común, juegos infantiles, techado con lonas; sala-comedor, cocina, área juvenil de entretenimiento y estudio, área dreams room, auditorio y pronto se establecerá el Aula Magna en un piso superior. Con base en patrocinios y donaciones, a la fecha han realizado siete viajes a Disneylandia en beneficio de 53 niños con cáncer, con apoyo en Aitana North American Children’s Association (ANACA), concluyó Yusi Dzib Echeverría.